En medio de la polémica, el Ministerio de Justicia de Turquía está en busca de Faruk Fatih Özer, fundador de la plataforma de intercambio global de criptomonedas Thodex, por presunto fraude por u$s2.000 millones.
El jueves de la semana pasada, la Fiscalía General de Anatolia abrió una investigación tras conocerse la noticia de que el hombre, nacido en 1994 en Gebze, había huido a Tirana (Albania) dos días antes.
La estafa
El empresario, en un comunicado publicado en la web de Thodex, ha confirmado que abandonó Turquía el pasado 19 de abril, aunque sostiene que las acusaciones de fraude "son infundadas" y atribuye el cierre "temporal" a la necesidad de realizar labores de mantenimiento y de comprobar la causa de recientes "fluctuaciones anormales" en las cuentas coincidiendo con las negociaciones de la empresa con inversores.
"Las alegaciones sobre la pérdida de unos u$s2.000 millones de 391.000 clientes carecen de fundamento", señala el empresario turco, subrayando que la compañía había remitido sus cuentas a las autoridades supervisoras y asegurando que espera retornar al país en unos días "tras reunirse con inversores extranjeros".
Según la prensa turca, agentes de policía habrían desarrollado una operación en ocho provincias del país en el marco de la investigación sobre el presunto fraude de Thodex que, hasta ahora, se habría saldado con la detención de 62 personas, además de con la incautación de documentación y materiales.
El próximo 30 de abril entrará en vigor en el país otomano la prohibición de realizar cualquier pago "de manera directa o indirecta" mediante el uso de criptomonedas, después de que el Banco Central de Turquía determinase el pasado 16 de abril que representan "riesgos significativos".
En su decisión, el instituto emisor turco tuvo en cuenta que estos activos no están sujetos a ningún mecanismo de regulación y supervisión ni a una autoridad reguladora central, además de verse sometidos a una excesiva volatilidad.
Asimismo, el banco central advirtió de que las criptomonedas pueden ser utilizadas en acciones ilegales debido a sus estructuras anónimas, mientras que también pueden ser robadas o utilizadas ilegalmente sin la autorización de sus titulares, y las transacciones realizadas son irrevocables.
"Se considera que su uso en pagos puede ocasionar pérdidas no recuperables para las partes implicadas en las transacciones debido a los factores mencionados", explicó la institución.
Otro exchange en la mira
Por otro lado, una segunda plataforma de compra venta de bitcoin colapsó y cuatro de sus empleados fueron detenidos ante la sospecha de un fraude multimillonario.
Se trata del exchange Vebitcoin, que explicó en un breve comunicado publicado en su sitio web que cesó todas sus actividades después de enfrentar tensiones financieras y que informaría a los clientes sobre la situación lo antes posible.
En el contexto de una investigación, las autoridades turcas bloquearon las cuentas bancarias nacionales de Vebitcoin y detuvieron a cuatro personas como parte de una investigación sobre el exchange. Según datos publicado por CoinGecko, Vebitcoin tenía casi u$s60 millones en volúmenes comerciales diarios antes de su colapso.