Desde Fundstrat, basan su análisis en una perspectiva positiva sobre lo que pueda pasar con el avance de diversas aplicaciones en la red de Ethereum.
Entre estas innovaciones mencionan a los contratos inteligentes, las stablecoins que mantienen paridad con el dólar estadounidense y los protocolos de finanzas descentralizadas (DeFi, por sus siglas en inglés), como desencadenantes de una acelerada subida alcista de Ether.
Sumado a esto, los expertos también mencionaron las comisiones en Ethereum, criticadas por diversos analistas dada su magnitud, son otro de los aspectos que la firma de analistas financieros examina como un posible indicador alcista.
Asimismo, en base a una investigación para revelar más factores, señalan que el elevado consumo de gas (como se denomina a las comisiones en esta red) es el equivalente etherean al creciente número de inversionistas institucionales que llegan a Bitcoin (BTC). Ambos factores serían fomentadores del aumento de precio de estas criptomonedas, en una comparación que pocos realizan, por considerar poco influyente.
La compañia estima que las comisiones que se paguen en Ethereum a lo largo de 2021 alcanzarán los u$s4.000 millones, es decir, casi siete veces más respecto a los u$s 600 millones que se pagaron durante 2020.
En base a cálculos estadísticos, y si se tiene en cuenta la diversidad de factores mencionados, los numeros que manejan los analistas sostienen que un precio de ETH cercano a los u$s10.500 sería acorde con la magnitud de este crecimiento.
A la explicación previa, los especialistas le sumaron las potenciales inversiones institucionales que, según los pronósticos, también llegarán a Ethereum durante el presente año.
A este contexto, los inversores también deberían sumar la expectativa por nuevas propuestas de mejora y por el desarrollo de la versión 2.0 de Ethereum, que ya se encuentra en funcionamiento de manera parcial.
Esto es un puntapie de razón para aquellos inversores que creen que el token nativo de la blockchain, creado por Vitalik Buterin, puede generarles un retorno monetario considerable en un futuro cercano.
Un Ether a u$s10.500 supondría un incremento de ocho veces su precio actual (u$s1,331.77 al momento de redacción de esta nota) durante 2021. No sería descabellado pensar en la posibilidad de que se de esta alza, ya que en los últimos 12 meses pasó de los u$s168 hasta los u$s1.432, por arriba de su anterior máximo histórico de u$s1.420. Creciendo así proporcionalmente unas 8,42 veces, en este período.
Incluso, otras criptomonedas y tokens, varios de los cuales fueron desarrollados sobre la blockchain de Ethereum, también podrían ver incrementado su precio como consecuencia de la valorización alcista de ETH. Si esto ocurriera en forma generalizada, estaríamos frente a la denominada altseason, o temporada de altcoins.