La presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, remarcó el fuerte interés de los ciudadanos europeos en lo que respecta al desarrollo de un euro digital, que la directiva espera que llegue en un plazo "no mayor a cinco años".
Sin embargo, aclaró que la creación de esta moneda digital centralizada no supondrá la desaparición del dinero en efectivo.
Según la jefa del BCE, es difícil estimar una fecha "porque en el mundo fintech las cosas cambian muy rápido y no sólo necesitamos estar alerta sino avanzar de manera segura".
También remarcó que no se trata de algo "para mañana", sino que llevará tiempo, aunque ha expresado su convencimiento de que "habrá un euro digital" porque el BCE debe dar respuesta a la demanda de los ciudadanos y "esa demanda está".
En este sentido, la francesa destacó la participación récord durante el periodo de consultas abierto por el BCE desde el pasado mes de octubre y que concluyó este martes y en el que se han recogido 8.221 comentarios por parte de ciudadanos, empresas y asociaciones industriales.
El euro digital podría estar dentro de cinco años
De acuerdo con el análisis preliminar de las respuestas recibidas, el 41% del total pidió al BCE que implementara características en el euro digital para garantizar la privacidad de los pagos. Por detrás se situaron aspectos como la seguridad (17%) o que tenga un alcance paneuropeo (10%).
"El elevado número de respuestas a nuestra encuesta muestra el gran interés en los ciudadanos y empresas de Europa en dar forma a la visión de un euro digital", remarcó el miembro del Comité Ejecutivo del BCE Fabio Panetta.
El instituto emisor publicará un análisis completo de las respuestas recibidas a lo largo de la primavera boreal (otoño en el Hemisferio Sur) y será un aspecto "importante" a tener en cuenta en la decisión de si se da el visto bueno final al proyecto de euro digital.
Los escenarios que baraja actualmente el Eurosistema en los que podría ser necesaria la emisión de un euro digital incluyen que el crecimiento de la demanda de pagos electrónicos haga necesario una forma de pago digital y europea libre de riesgo, una caída "significativa" del uso del efectivo como forma de pago, el lanzamiento de formas de pago privadas que generen preocupaciones regulatorias y una adopción generalizada de las divisas digitales por parte de otros bancos centrales.
Cuándo llega el euro digital
La presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, reclamó una regulación global de criptomonedas como el Bitcoin, al que calificó de "activo altamente especulativo" que, aparte de "negocios divertidos" también se ha demostrado que son empleados para "actividades reprobables" como el blanqueo de capitales.
"Es un activo altamente especulativo", destacó Lagarde durante la conferencia 'Reuters Next', en la que exigió la "absoluta necesidad" de abordar la regulación de estos activos desde una perspectiva global, "puesto que si existe una escapatoria, esa vía de escape será utilizada".
Para Lagarde, el mundo debe regular criptomonedas para evitar delitos
"Pienso que es absolutamente necesaria una cooperación global y una acción multilateral como la iniciada en el G7 y luego trasladada al G20, pero es algo que es necesario abordar", remarcó la extitular del Fondo Monetario Internacional.
La cotización del bitcoin registraba este miércoles una suba de alrededor del 6%, hasta rozar los 35.000 dólares, un precio que representa una revalorización del 19% en lo que va de año y de más del 300% en doce meses, con una capitalización de mercado estimada de casi 650.000 millones de dólares.
Qué países buscan sus propia moneda
Las principales potencias corren contrarreloj para encontrar una vacuna al coronavirus que permita llegar a una nueva normalidad, lo más parecida posible al escenario prepandemia.
Pero también participan en una carrera que comenzó antes del brote de Covid-19, si bien la enfermedad no hizo más que confirmar en lo "micro" lo que ocurrirá en lo "macro": el dinero del futuro será digital y tendrá forma de criptomoneda.
Más allá del recelo con el que se vio a Bitcoin desde sus comienzos, los principales inversores institucionales ya apuestan a las divisas virtuales y cada vez más corporaciones resguardan parte de su capital en ellas.
En efecto, la reciente escalada de la divisa fue la respuesta a una mayor confianza de los fondos de inversión ante el riesgo inflacionario que sugiere la "fiebre" de emisión de los gobiernos para reactivar la economía. Por ejemplo, la Reserva Federal inyectó u$s9 billones, el 20% de todos los dólares creados en 200 años de historia estadounidense.
Así, las divisas virtuales se "graduaron" este año como activo confiable. Tanto es así que las economías desarrolladas y varias potencias ya apuestan por su propia moneda digital:
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China: el Banco Popular ya está probando el e-yuan en alianza con dos pesos pesados de la tecnología: Alibaba y Tencent
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Reino Unido: llamó a crear una divisa virtual que reemplace al dólar en el comercio internacional
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Francia: prueba el Euro Digital con bancos de primer nivel
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Rusia: el gobierno está avanzando en el rublo digital (como novedad, no requerirá de conexión a Internet para algunas operaciones)
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Estados Unidos: Accenture presentó un proyecto de dólar digital (por sun parte, la Fed creó una plataforma similar)
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Brasil: el gobierno acaba de anunciar que su plataforma PIX de pagos inmediatos podría evolucionar hacia una criptomoneda
Si las principales economías del mundo avanzan en tener su propia moneda digital, surge una pregunta: ¿Tiembla el dólar como divisa de intercambio internacional?
En avance
Según expertos, los gobiernos y el sistema financiero global están encarando una transición hacia las divisas virtuales para reconvertir procesos tras décadas sin cambios.
"La crisis global dejó en evidencia todas las ineficiencias de un sistema financiero tradicional manejado por bancos. No ha habido mayor avance tecnológico en los últimos 50 años", señala a iProUP el experto en criptomonedas Efraín Barraza quien agrega que "incluso pudiendo hacer uso de todas las ventajas de la internet, el sector ha sabido aprovechar el 10%".
Para Alberto Vega, CEO y cofundador de Bithan, las ayudas estatales en la pandemia son uno de los puntos que saltan a la luz para mostrar esa obsolescencia del sistema financiero.
"Un ejemplo fue la lentitud en repartir las partidas presupuestarias de asistencia, como el IFE, con demoras de hasta meses en depositarse al beneficiario. El problema es que estos estímulos pasan por intermediarios que le quitan eficiencia y rapidez al sistema", resalta.
Barraza agrega que "los excesos en la política monetaria de EE.UU. han generado que los bancos centrales de todo el mundo estudien nuevos modelos de emisión para moderar los efectos de este exceso de liquidez en los mercados internacionales".
Facebook busca con Libra lanzar una criptomoneda atada a una canasta de divisas fiat, como el euro y el dólar
El caso más interesante es el de China, que comenzó a experimentar esta tecnología en 2014. Según Vega, a principios de mes, "el gobernador del Banco Popular, Yi Gang, afirmó que el yuan digital está siendo testeado en cuatro de las ciudades más importantes del país, con más de 4 millones de transacciones por 2.000 millones de yuanes".
El proyecto oriental tomó mayor impulso el año pasado, como respuesta a los planes de Facebook de lanzar Libra, una moneda digital de alcance global y cotización estable, atada a una canasta de divisas fiduciarias, como el dólar y el euro. Pero el Covid-19 aceleró los planes de otros países.
"En la reunión de 26 Banqueros Centrales del 6 de noviembre, los representantes indicaron que la pandemia generó una mayor expansión del ecommerce y tecnologías de pagos electrónicos. Por eso, los bancos están más interesados en divisas virtuales", asegura a iProUP Sebastian Wain, cofundador de CoinFabrik.
Sin ir más lejos, el Banco Central Europeo señala que "las monedas digitales son la expresión más visible del dinero electrónico", con operaciones "seguras, transparentes y rápidas".
Duelo de titanes
Una moneda digital será clave para el comercio mundial online, que en 2019 significó un total de u$s19.000 billones (un 19 seguido de 12 ceros) según números del Banco Mundial. Esto equivale, por ejemplo, a 10 veces el valor bursátil de Apple, la compañía más valiosa del planeta.
Obviamente, la guerra comercial-tecnológica que llevan adelante Estados Unidos y China también tiene su correlato en el plano cripto.
"En el comercio global, a nadie lo obligan a usar dólares. Particulares y empresas recurren al billete verde por la confianza que genera", afirma a iProUP Matías Bari, cofundador de SatoshiTango.
En este punto coincide Nahuel Burbach, experto en monedas digitales y representante argentino de la billetera Zerion, quien afirma a iProUP que "no sólo se tratará de lanzar una moneda virtual, sino que esta posea una propuesta tecnológicamente superadora y genere confianza".
Agrega que "una implementación adecuada acelera y mejora el funcionamiento del sistema de comercio internacional y a disminuir la fricción entre diferentes actores de la cadena de valor, con el agregado de traer mayor transparencia".
En esta carrera, Estados Unidos corre con ventaja:
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El 62% de las reservas de los bancos centrales del mundo son en dólares (contra el 20% del euro y casi el 2% del yuan)
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El 88% de las operaciones globales se efectúa con billetes verdes
Sin embargo, en lo "técnico", China tiene con qué competir:
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Posee el 50% de las "granjas" (depósitos con servidores) de minado de Bitcoin (contra el 14% de EE.UU.)
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Cuenta con los tres principales fabricantes de equipamiento, que acaparan casi todo el mercado: Bitmain (63%), WhatsMiner (10%) y Canaan (18%)
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Dispone de electricidad más barata, lo que puede generar una plataforma cripto más segura y en menor cantidad de tiempo
"Hay gente que argumenta que ahora que China va a tener el yuan digital, todos los que usan el dólar se van a pasar inmediatamente y esto acarreará profundas consecuencias", señala Vega.
Según el experto, el mayor beneficio pasa por acelerar el desarrollo de una nueva infraestructura financiera global, basada en Internet, para cumplir la visión del efectivo electrónico entre pares".