La relación de Mercado Libre con el Gobierno no podría definirse como fluida durante el primer año de Alberto Fernández.
El CEO del unicornio, Marcos Galperin, no dudó en mostrar su afinidad con Mauricio Macri y hasta fue fiscal en las elecciones legislativas de 2017 y en las presidenciales de 2019. El exmandatario devolvió con elogios y hasta lo ponderó como el modelo empresarial del nuevo milenio.
A su vez, el mandamás del unicornio fue un duro crítico del kirchnerismo. Si bien se reunió con Alberto Fernández ni bien resultó electo, antes de que asumiera volvió a fijar domicilio en Montevideo, donde residió durante los mandatos de Cristina Kirchner.
Ciertas medidas habían predicho cierta tensión entre el Gobierno y el unicornio, principalmente los cruces con los sindicatos de Hugo Moyano, que buscaba afiliar a los trabajadores del centro logístico; y de Sergio Palazzo, que pretende sumar a la Bancaria a los profesionales de Mercado Pago.
Además, los cambios en la Ley de Economía del Conocimiento parecían hechos a la media del unicornio: no lo beneficiarían tanto como prometía la versión original gestada durante el macrismo.
Sin embargo, la visión de negocio a nivel regional y el viento de cola de la pandemia en ecommerce y pagos digitales lograron que Mercado Libre se convierta en la empresa argentina más importante de la historia y también la de mayor valuación a nivel latinoamericano: u$s90.000 millones.
Para sorpresa de muchos, Galperin tuvo en Alberto Fernández a un aliado inesperado. Ciertas medidas llevadas a cabo durante el primer año de gestión del Presidente no sólo no perjudicaron al unicornio, sino que favorecieron su desarrollo.
Devaluación y pandemia
El gobierno de Alberto Fernández reforzó las limitaciones de acceso al dólar que había impuesto el macrismo en los últimos meses de gestión para evitar un vaciamiento acentuado de las reservas del Banco Central.
Pero a la crisis económica hubo que agregarle la pandemia: el 20 de marzo, Alberto decretó el aislamiento social preventivo y obligatorio que prácticamente cerró todo local a la calle "no esencial", una medida que no se imitó de manera tan prolongada en las otras dos grandes plazas en las que opera Mercado Libre: México y Brasil. Y, obviamente, disparó las operaciones de comercio electrónico.
Martin Sigwald, portfolio Manager de Quiena, explica que la pandemia permitió adelantar años de trabajo en cuanto a la penetración, tanto de clientes como de vendedores.
Y resalta que que la amenaza de segunda ola del virus, más agresiva, más el retorno a una cuarentena más restrictiva, terminen de convertir a aquellos que todavía no estén habituados al ecommerce.
También destaca la situación financiera del unicornio. "Cerca del 80% de los ingresos de Mercado Libre vienen de afuera de Argentina y más del 50% de los sueldos y gastos fijos se concentran a nivel local", explica Sigwald.
"La depreciación del peso frente a otras monedas de la región y al dólar lo beneficia, porque le abarata los costos locales, en una ecuación donde la mayoría de sus ingresos son en una moneda más fuerte que la de sus gastos", agrega.
Sin embargo, destaca que la idea del unicornio "es seguir manteniendo el negocio, pero no hacer inversiones fuertes como las que si estamos viendo en otros países de la región", en alusión a los centros de distribución que abrió en Santiago y San Pablo, además de la flota aérea que lanzó en México y Brasil.
"Creo que es una muy buena decisión, no solo por la problemática económica y política puntual, sino porque va a recibir la mayoría de sus ingresos de monedas más fuertes y gran parte de sus gastos los va a pagar en una divisa más débil, como el peso", remarca.
Contra la competencia
Si bien Macri promovió la importación de diversos productos –como la electrónica–, el gobierno de Alberto Fernández dio marcha atrás y reinstauró las licencias no automáticas. Así, cada empresa que quisiera ingresar un artículo al país debe contar con el "OK" oficial.
Esto dificultó cada vez más el avance de otros marketplaces como Amazon, que ya tiene su plataforma abierta en Brasil para la venta de todo tipo de productos, mientras que busca locales en Santiago de Chile para el retiro de los artículos que se venden en EE.UU.
En la Argentina, en cambio, las posibilidades del ingreso de la firma de Jeff Bezos dentro del mapa local del ecommerce son cada vez menores. Así, Mercado Libre, a falta de rivales de porte, refuerza todavía más su posición de liderazgo.
Lejos de competir, entonces, el unicornio anunció en noviembre que Amazon Web Services (AWS) será su principal proveedor de nube para mejorar las experiencias de los usuarios y acelerar el lanzamiento de nuevos servicios en el marco de sus proyectos de expansión regional.
"Es muy particular el desarrollo de los marketplace en Latinoamérica y Amazon no logra superar a Mercado Libre en aquellos mercados donde está con su marketplace", advierte a iProUP Ignacio E. Carballo, investigador y director del Ecosistema de Programas Fintech en UCA.
América Latina es heterogénea y "tiene una población y una estabilidad política y macroeconómica que está en las antípodas de otros mercados, como el asiático, donde Amazon si está dando batalla", agrega.
"Quizá por eso relegó ingresar con real fortaleza a comerse el mercado latinoamericano y después vino un cambio de contexto en el cual Mercado Libre ya es un player muy asentado en la región", señala el economista.
Según Carballo, antes de este crecimiento exponencial, el unicornio "ya tenía una posición ventajosa en relación a las grandes plataformas de ecommerce globales, que terminó de sellar a fuego este 2020 con su alianza con Paypal que, si bien es un gigante que podría desplazarlo, decidió aliarse".
Transferencias 3.0
El principal hito del año dentro del segmento fintech –en el que la firma de Galperin es el principal jugador con Mercado Pago– fue el lanzamiento de Transferencias 3.0.
Este sistema, diseñado por el Banco Central, permitió que más de 100.000 comercios de todo el país comenzaran a aceptar el QR interoperable, es decir, que el usuario abone desde su celular con cualquier billetera electrónica o aplicación bancaria escaneando el código provisto por cualquier jugador del mercado.
El principal objetivo residen en que el próximo año todas las empresas del país puedan cobrar por sus servicios con un único código QR (sin importar qué fintech lo suministre) y recibir el dinero de forma instantánea. Así, se limitará el uso de efectivo.
"El unicornio fue pionero en el mundo de los pagos digitales, con el lanzamiento de la billetera y la tarjeta prepaga en 2017 y, de ahí en adelante se comió el mercado con innovación", explica Carballo.
Según el economista, "la estrategia fue ir con la gratuidad absoluta en los códigos QR durante algún tiempo, e hicieron un gran esfuerzo y una inversión enorme para lograr una red de adquirencia con casi 1,5 millones de comerciantes".
"En el medio hubo un cambio de gobierno, cambió la lógica de impulso al sector y de articulación regulatoria. La primera propuesta iba a ser totalmente gratuita, pero en una mesa en el Banco Central con adquirentes y empresas de pagos, Mercado Libre levantó la voz acerca de que esa posibilidad no es sostenible en el largo plazo. Entonces se fijó un tope del 0,8%", explica.
No sólo eso. La compañía, que iba a ser la más afectada al tener la red más amplia de locales, en su gran mayoría barriales, logró que el 75% de esa comisión corresponda al proveedor de QR de un comercio pequeño y el 25% restante a la billetera que use el consumidor. La proporción es la inversa en el caso de negocios grandes, como las cadenas de supermercados.
En ese marco de interoperabilidad, con todas las billeteras subidas a su código QR, Mercado Libre pierde, pero también gana. En términos de cuánto está entregando cada actor, claramente él es el que más pone. No obstante, si el ecosistema crece y se nutre, todos ganan.
"Al final del día, si hay códigos en todos los comercios, en un esquema en el que la comisión se distribuye entre emisor y el adquirente, Mercado Libre se beneficia cada vez que un usuario pague con su billetera. Además de correr con la ventaja de tener un producto superador en muchos sentidos y tres años de experiencia", sintetiza Carballo.
Nueva Ley del conocimiento
Apenas comenzó el mandato de Alberto Fernández, el Ministerio de Desarrollo Productivo puso en stand-by la aplicación de la Ley de Economía del Conocimiento, que comenzaba a regir desde el 1º de enero.
Bajo los argumentos de que la norma original contemplaba una situación económica diferente y no privilegiaba a las Pymes, el Gobierno lanzó un nuevo proyecto con modificaciones que finalmente fue convertida en ley en en octubre (ver infografía).
Entre los beneficios que establece se destacaban dos que influían en el unicornio, a saber:
- Requisitos para el registro: se excluía el autodesarrollo, es decir, el software creado para uso propio, como parte de la obligación de exportar el 70%. Sin embargo, entra por cumplir los otros dos: capacitación en personal y venta al exterior
- Reducción de 60% del Impuesto a las Ganancias: sólo quedó para las microempresas, y se redujo para medianas (40%) y grandes (20%)
Así, sólo las empresas de desarrollo de software podrán gozar de ese recorte de forma retroactiva a enero y compañías como Mercado Libre perderán casi todo el año 2020.
Para Pablo Iacub, presidente del Grupo Calipso, afirma que la ley es fundamental para el crecimiento del mercado: "Fue un gran trabajo lograr que se impusiera y por suerte salió".
Según su análisis, "el incentivo es el mismo para todos" y "es una excusa que Mercado Libre se lleva todo, sino solo su área de desarrollo de software".
"Cabe señalar que el beneficio se lo da a el gobierno kirchnerista en el 2007 y no Macri, algo que fue muy discutido dentro del sector en su momento. Hay gente que opina que debería tenerlo, gente que no, lo cierto es que lo quieren presentar como un 'turro macrista' y nada más lejos", completó.
De esta forma, el unicornio, que parecía estar en la mira del Gobierno y podría haber sido perjudicado en la redacción de la ley, finalmente terminó siendo contemplado. Hasta el propio Galperin celebró en su Twitter la reglamentación de la norma.
Habrá que ver cómo impactan estas medidas en el sector el año próximo y cuál es el rol que tendrá Mercado Libre en este esquema. Por el momento, todo parece indicar que podrían calmarse las aguas y, en un escenario más amable, quizá el unicornio vuelva con nuevos proyectos para el país.