En el marco de la crisis económica en Argentina, en la que los ahorristas sufren el súper cepo para acceder a dólares y ven cómo sus pesos valen menos día tras día con una inflación que no deja de sacudir a los bolsillos, las criptomonedas fueron furor en 2020.
Así, la cantidad de personas que compraron este tipo de activos aumentó 300% en el país entre enero y diciembre, al ser considerados por los nuevos usuarios como un refugio de valor. Y se estima que su cotización seguirá creciendo –y a ritmos vertiginosos– en los próximos meses.
Pero dentro de estos miles de individuos que poseen Bitcoins, un importante porcentaje ve en este instrumento la posibilidad de obtener una ganancia significativa. Cabe destacar que en el "marzo negro", su valor (que comenzó 2020 en u$s7.200) bajó a u$s5.000 por las dudas que sembró la pandemia. Pero en los últimos días rompió el techo de los u$s33.000.
En Argentina, el que apostó a inicios de 2020 por el Bitcoin, ganó. Y con creces. El ahorrista que haya invertido a principio del año pasado $20.000 elevó su apuesta a unos $200.000 por estas horas: en enero, la moneda se vendía en exchanges (casas de cambio) locales a $540.000 y en los últimos días avanzó hasta $5,5 millones. Es decir, se multiplicó 10 veces en el último año.
Por tal motivo, la criptomoneda líder se consagró como una de las operaciones "estrella" ante los sucesivos controles del Banco Central sobre la compra de moneda extranjera.
Magdiela Rivas, gerente para Latinoamérica de Paxful, revela a iProUP que el interés creciente de los argentinos ya se podía observar desde 2019, cuando acudían a las criptomonedas "para proteger sus ahorros ante la inflación y las restricciones cambiarias", proceso que recibió un fuerte empujón tras la pandemia.
La pregunta del millón: ¿qué ocurrirá en 2021?
Consultados por este medio acerca del comportamiento que tendrá el Bitcoin en los próximos doce meses, los especialistas coinciden de manera contundente: la tendencia será positiva y las posibilidades de que siga batiendo récords siguen siendo elevadas.
Gabriel Vago, CEO de ArgenBTC, considera que en el inicio del año "veremos cierta calma, tanto en el precio como en el volumen de operaciones. Pero probablemente en la segunda mitad del 2021 se empiece a recalentar nuevamente el mercado".
Iván Tello, cofundador de Decrypto.la, prevé una tendencia ascendente y fundamenta su respuesta en los ciclos de los mercados: "El capital institucional nunca entra al final de un ciclo, sino más bien en sus principios o durante los desarrollos alcistas, y actualmente se comienza a ver una tendencia favorable por parte de grandes fondos por colocar parte de sus posiciones en BTC".
El halving de mayo de 2020 esperanza con que la moneda siga avanzando este año hacia nuevos récords
Matías Bari, cofundador de SatoshiTango, resalta a iProUP como muy factible que en 2021 el Bitcoin continúe batiendo récords y pone el foco en la creciente demanda que generó en empresas como Microstrategy, firma que compró más de u$s1.000 millones, noticia que originó un debate entre su CEO y el multimillonario dueño de Tesla y SpaceX, Elon Musk.
"Hay mucho interés desde corporaciones, sobre todo en Estados Unidos. Eso despierta la atención en las personas y todo genera presión sobre el precio", señala el especialista.
Además, tanto Maximiliano Hinz, Latam operations director de Binance, como Rivas, coinciden con Bari y Tello en el papel destacado de compañías y fondos de inversión que apuestan por este tipo de activos. Lo alimentan "cada vez más" y, de seguir sumándose, van a tener un protagonismo muy fuerte en las próximas subidas.
¿Llegará a los u$s 100 mil?
En diálogo con iProUP, Manuel Beaudroit, CEO de Belo, considera que Bitcoin está iniciando un nuevo ciclo alcista y si bien "es muy difícil dar un pronóstico, muchos expertos hablan que su cotización estará muy cerca de los u$s100.000. Yo creo que un valor entre 60.000 y 80.000 dólares es realizable".
En tanto, la especialista de Paxful indica que es complicado hacer una proyección exacta del valor que puede alcanzar el BTC en 2021 y manifiesta que estas predicciones "sólo pueden realizarse de forma mensual o semanal, porque depende de diversos factores, tales como regulaciones, movimientos de inversiones y volumen de capitalización".
Por su parte, Vago, quien espera un fuerte incremento para el segundo semestre, precisa que esta criptomoneda sigue sus patrones positivos de 4 años –los anteriores finalizaron en diciembre de 2013 y 2017–, "por lo tanto el ciclo actual debería terminar -si es que la pandemia no lo alteró- en diciembre de 2021, llegando ahí a nuevos máximos históricos".
En su visión, "no sería extraño ver valores de u$s50.000 durante 2021 si es que se mantiene el patrón cíclico de 4 años".
Ante la consulta, Bari desliza que "es posible que rompa los u$s50.000 aunque estará sujeto a fuertes atibajos. Sin embargo, a largo plazo, creo en el Bitcoin y sé que es una tecnología disruptiva que transforma y modificará la forma en que hacemos muchísimas cosas", completa.
Tello, explica que el primer objetivo a cumplir está en alcanzar la zona de los u$s45.000, y subraya que "desde este punto dependerá el nivel de euforia para ver hasta dónde podría llegar antes de terminar este ciclo alcista".
"¿El valor del futuro? No sabemos a dónde puede llegar –agrega Hinz–. Si es un año similar a 2020, podemos verlo tocar los u$s50.000, pero hasta que no alcance un techo nadie sabe cuál será".
Indicios
El Bitcoin es un activo con cotización volátil, pero si se aprende a leer el contexto se pueden llegar a anticipar movimientos favorables –o negativos– de esta criptomoneda.
El director de Binance explica que "la lateralización en el rango 30.000 a 33.000 dólares es un punto importante. Esto afianza el precio de u$s30.000 como un soporte".
Además, el experto destaca la importancia de los inversores institucionales, los cuales han sumado capital y revelaron mucho interés en apostar de manera agresiva en la divisa virtual.
Imparable: 10 veces creció la cotización de
Bitcoin en los últimos 12 meses
"Ya se demostró la seguridad de Bitcoin, se expuso su escalabilidad y ahora es cuando los grandes fondos de inversión y empresas públicas empiezan a invertir de manera que no se ha visto en el pasado. Este tipo de operaciones son la punta de lanza para que continúe la tendencia alcista", agrega Hinz.
Por su parte, Rivas describe que existen varios indicios a los cuales se les debe prestar atención para intentar predecir un comportamiento positivo en el mercado, entre los que destaca:
- Una comunidad cripto más madura, que ayuda para que no se produzca un desplome como el de la burbuja del 2017
- La incorporación de criptomonedas a plataformas más tradicionales como PayPal
- Un aspecto que ya se mencionó que es muy importante: el incremento de las inversiones institucionales
- Un mercado alcista que influye en el ánimo de compra (FOMO: Fear of missing out o "miedo a quedarse afuera") y que hace que cada vez sean más quienes deseen sumarse
Por su parte, Bari advierte que sería un error, al momento de predecir qué ocurrirá en el futuro, utilizar la información del pasado. "Yo creo que Bitcoin subirá a largo plazo por razones de base, profundas, que tienen que ver con la disrupción de la tecnología. El precio es una foto del sentimiento de la gente en ese momento", completa.
Beaudroit pone el foco en los riesgos que pueden complicar su sendero favorable: "Una regulación contraria a la industria de las criptomonedas en EE.UU. sería malo para el sector, aunque parece que ésta será más laxa de lo que se esperaba inicialmente".
Con toda esta información es factible pensar que el 2021 será un año positivo para la cotización del Bitcoin y no sería descabellado verlo pulverizar sus propios récords.
Pero como en toda inversión, lo primero que debe tener en claro la persona antes de invertir es con qué fin quiere subirse a este fenómeno: si lo hace para protegerse y tenerlo a largo plazo o para hacer negocio y venderlo apenas considere que la diferencia es tentadora.
Apostar por él implica tener tolerancia al riesgo, pero si el perfil es más conservador también podés integrarlo de manera progresiva a la cartera de inversiones para estudiar sus movimientos.