La semana pasada Bitcoin batió un nuevo récord gracias a su alianza con PayPal. Hoy su precio pasa los u$s13.000 y son muchos los analistas económicos e inversores que plantean a la criptomoneda líder como una posibilidad de inversión ante la depreciación por la caída del valor del dólar.
Toyota Systems, la rama de tecnología de Toyota Motor Corporation, está colaborando con la empresa japonesa de intercambio de criptografía DeCurret para desarrollar un token o moneda digital de marca Toyota, según un anuncio oficial del 26 de octubre.
El piloto a gran escala involucrará a 2.500 empleados de Toyota Systems. La plataforma contará con pagos en moneda digital para los beneficios.
Según el anuncio, los empleados participantes podrán cambiar la moneda digital por puntos de beneficios o regalos de un catálogo. Toyota Systems señaló que la moneda digital no puede ser cambiada por yenes japoneses.
El nuevo piloto utiliza la plataforma basada en blockchain propietaria de DeCurret para la emisión y gestión de monedas digitales. El piloto probará la escalabilidad de un modelo de p2p en la cadena de bloques, así como cuestiones comerciales relacionadas con los pagos a un gran grupo de personas.
Toyota ha estado explorando activamente la industria Blockchain, estableciendo su propio Toyota Blockchain Lab en marzo de 2020. La automotriz se unió al consorcio R3, una importante alianza industrial, en 2016.
Toyota no es el único fabricante de automóviles que experimenta con la cadena de bloques y la criptografía. A principios de octubre, BMW Corea anunció que será la primera sucursal del Grupo BMW en realizar una prueba simbólica basada en blockchain que se espera que se lance completamente en el país a finales de 2020.
En septiembre de 2020, el fabricante de autos francés, Renault puso a prueba su proyecto de cadena de bloques destinado a facilitar la certificación de conformidad de las piezas de los vehículos.
Por otro lado, la firma nipona anunció semanas atrás la creación de un fondo global de inversiones dotado con u$s 800 millones y que irá destinado a desarrollar nuevas tecnologías de conducción autónoma o inteligencia artificial.
El fondo, bautizado Woven Capital, comenzará a operar en 2021 y estará gestionado por una filial del instituto de investigación y desarrollo de Toyota (TRI-AD), que tendrá sede en Estados Unidos, según ha detallado el fabricante japonés en un comunicado.
Toyota ha explicado que el objetivo del nuevo fondo será invertir en "compañías emergentes que trabajen en tecnologías innovadoras como la movilidad autónoma, la inteligencia artificial, el análisis de datos, el aprendizaje automático, la conectividad y las ciudades inteligentes".
Entre los "ambiciosos" proyectos que aspira a impulsar el fondo se encuentra una "plataforma de mapeado automático", un software abierto que permite a diferentes compañías crear y distribuir mapas de alta precisión, así como actualizar diferentes variables para su uso por vehículos equipados con sistemas de conducción autónoma.