El último round entre el CEO de Mercado Libre, Marcos Galperin; y el líder camionero, Hugo Moyano, es parte de una pelea que incluye varios desencuentros desde hace más de dos años.
Amante del bajo perfil, el empresario comenzó a tener exposición pública con el Gobierno de Cambiemos, al que no dudó en apoyar públicamente y hasta fue fiscal en las últimas elecciones Legislativas y Presidenciales. Mauricio Macri, por su parte, aprovechó la figura del exitoso entrepreneur para mostrar las bondades de su sistema y hacer alarde de la "meritocracia" en contraposición al modelo "asistencialista" que le adjudicaba al kirchnerismo.
El apoyo de Galperin al macrismo no fue sólo en las palabras: exiliado en el Uruguay durante los dos períodos de Cristina Fernández, no dudó en repatriarse junto a su familia. Ni tampoco chistó en regresar a tierras orientales cuando la victoria de Alberto Fernández ya era un hecho.
Así, la figura del rey del ecommerce latinoamericano fue ocupando un lugar de mayor relevancia en la agenda local y el kirchnerismo no dudó en erosionar su imagen desde un frente que –en las malas– siempre es responde al Partido Justicialista: el sindicalismo.
El centro logístico
La primera aparición fuerte de Galperin fue en la antesala de una frustrada reforma laboral que planeaba el macrismo, pero trayendo a colación la modificación a las leyes del trabajo que habían tenido lugar en Brasil.
"Viendo la reforma laboral brasileña, Argentina puede 1) imitarla 2) salirse del Mercosur 3) resignarse a perder millones de empleos a Brasil", remarcó el empresario en Twitter, en lo que fue su incorporación oficial a la "grieta".
Para su centro logístico automatizado en la zona del Mercado Central, en la Matanza, la empresa firmó un convenio con el Sindicato de Carga y Descarga para los entonces 300 empleados.
Las instaciones, similares a las que posee Amazon en Estados Unidos, posee 75.000 metros cuadrados en el que trabajan hoy más de 12.000 personas en turnos rotativos gracias a la expansión del ecommerce.
Con ese convenio colectivo, Mercado Libre logró un entendimiento a nivel de empresa que modifica aspectos centrales clave de la Ley de Contrato de Trabajo, como:
- La implementación una jornada máxima de 192 horas por mes
- Jornadas diarias de hasta 12 horas (banco de horas)
- Turnos rotativos y trabajo a destajo
- Fraccionamiento de las vacaciones y su goce en cualquier época del año
- Polivalencia o multifunción
- Suspensiones con pago del 50%
- Limitaciones al derecho de huelga
El convenio fue firmado por el entonces Ministro de Trabajo y Producción, el economista Dante Sica, quien lo avaló antes de dejar su cargo, dejando sin otro camino al líder camionero que seguir con su reclamo en la Justicia.
De hecho, Moyano no lo dudó y denunció penalmente a Sica en los tribunales de Comodoro Py por "abuso de autoridad, violación de deberes de funcionario público y falsedad material en instrumento público".
Un año antes, en diciembre de 2018, la empresa había comenzado su raid ascendente y triplicado su valor: de u$s293 que valía su acción en diciembre de 2018 hasta los u$s970 que figuran hoy en las pizarras de Wall Street.
Otro frente
La pulseada gremial no es la única que el CEO de Mercado Libre le viene ganando al líder sindical. La otra batalla es comercial, más exactamente con OCA, el correo privado que muchos asumen que es propiedad de los Moyano.
OCA es uno de los operadores logísticos que funcionan en Mercado Libre a través de Mercado Envíos: un pool de proveedores que sirven no sólo para el reparto puerta a puerta, sino que vendedores y compradores pueden entregar o retirar, respectivamente, paquetes en las sucursales para aminorar gastos de envío.
Sin embargo, OCA fue perdiendo terreno a favor de OCASA, un correo privado que duplicó sus operaciones fuertemente en la cuarentena a la par de las ventas en Mercado Libre.
En efecto, la compañía posee dos centros de distribución, en Sarandí y Avellaneda, que suman 30.000 metros cuadrados en los que colecta y distribuye los pedidos. Con el diario del lunes, la jugada fue magistral: OCA hoy posee demoras de hasta dos meses con los envíos de algunas cadenas de retail y marketplace bancarios.
El unicornio usa las instalaciones de OCASA para almacenar paquetes de un modo similar al que lo hace con su centro logístico propio. Justamente, una de estas locaciones también fue víctima del bloqueo de los seguidores de Moyano.
Pero ese no fue el único golpe al líder sindical: Mercado Libre también recortó el negocio del transporte por camión con Mercado Envíos Flex, un sistema en el que existen plataformas de motomensajería que transportan puerta a puerta los productos, con entregas en el día o al siguiente en las grandes urbes.
Pasión compartida
Es sabido que Galperin tiene dos pasiones deportivas. El rugby, deporte que practicó gran parte de su familia; y el fútbol, aunque ha perdido parte del fanatismo por este último.
Quienes trabajaron a su lado en YPF en los '90 reconocen que Galperin fue "un enfermo hincha de Independiente", club que por el momento es conducido por Hugo Moyano. Hasta solía salir rápidamente de la sede de la petrolera más de una vez para ir a ver algún partido en el Libertadores de América.
Sin embargo, el rey del ecommerce hoy por hoy sólo mira de reojo al Rey de Copas. Tal vez más por el desdén que siente por el management que conduce a la entidad más que por el desempeño deportivo reciente del Diablo.
Galperin no descarta en algún momento dedicarse a la vida "pública", aunque afirman que descartó más de una vez un cargo tanto a nivel político como deportivo.
Sabe que ser el empresario más exitoso de la Argentina le ofrece un rol social aún mayor. Así como reniega de la exposición pública, también detesta la "politiquería". Y tiene 50.000 millones de razones para evitar cambiar de rumbo.