El 30 de agosto, el juez del Supremo Tribunal Federal de Brasil, Alexandre de Moraes, dictó una orden de «suspensión inmediata» de la red social X, antes conocida como Twitter, en Brasil.
Esta medida surge después de que la empresa de Elon Musk se negara a nombrar un representante legal en el país.
Anteriormente, se había emitido una orden judicial que X no cumplió, exigiendo el bloqueo de cuentas que difundían mensajes considerados "de odio" y "noticias falsas".
El juez Alexandre de Moraes había establecido un plazo de 24 horas para que Elon Musk cumpliese con la legislación brasileña, advirtiendo que el incumplimiento llevaría a la suspensión de la red social X.
La disputa se agravó cuando Musk decidió cerrar la oficina de X en Brasil el 17 de agosto, despidiendo a todo el personal, incluidos los representantes legales.
Musk justificó esta acción alegando que se debía a las "exigencias de censura" impuestas por Moraes, quien amenazó con arrestar al representante legal de X si no se bloqueaban ciertos perfiles.
El 8 de agosto, Moraes había ordenado el bloqueo de siete cuentas vinculadas a simpatizantes del expresidente Jair Bolsonaro, una orden que X no cumplió, resultando en una multa diaria de 20.000 reales, equivalente a unos 3.560 dólares estadounidenses.
A pesar de la prohibición, los usuarios en Brasil podían eludir el bloqueo usando servicios de VPN.
No obstante, Moraes ha establecido sanciones de aproximadamente 8.000 dólares para aquellos que intenten burlar la restricción y acceder a X desde territorio brasileño.
La controversia en torno a la red social X ha impactado a otra empresa de Elon Musk, Starlink, que también opera en Brasil.
Según un comunicado de Starlink divulgado ayer en X, las cuentas bancarias de la compañía en Brasil han sido congeladas debido a las multas impuestas a X.
La orden emitida por el juez de la Corte Suprema, Alexandre de Moraes, a principios de esta semana, ha bloqueado las finanzas de Starlink y ha prohibido cualquier transacción financiera en Brasil.
Según el comunicado de Starlink, esta medida se basa en una decisión cuestionable que considera a la empresa responsable de las sanciones contra X, aplicadas de manera inconstitucional y sin los debidos procedimientos legales.
Starlink planea abordar esta situación legalmente, argumentando que la decisión se tomó en secreto y sin el debido proceso garantizado por la Constitución brasileña.
En respuesta a la situación, SpaceX, la empresa matriz de Starlink, ofrecerá acceso gratuito a internet en Brasil mientras se resuelve el conflicto.
Elon Musk señaló que, aunque no pueden recibir pagos, no desean interrumpir el servicio, ya que muchas escuelas y hospitales remotos dependen de Starlink para su conectividad.
La plataforma argumenta que cumplir con las demandas del juez Alexandre de Moraes implicaría violar leyes de varios países simultáneamente, creando una situación en la que la única opción viable era cerrar su oficina en Brasil.
Según X, el juez Alexandre de Moraes, quien forma parte del Supremo Tribunal Federal de Brasil, amenazó en secreto a uno de sus representantes con arresto si no se cumplían las órdenes judiciales para eliminar ciertos contenidos. El Supremo Tribunal Federal aún no ha respondido a las solicitudes de comentarios sobre la situación.
A pesar del cierre de su oficina en Brasil, la plataforma continuará operando para los usuarios en el país.
X declaró que las acciones de Moraes, que incluyen órdenes de censura para eliminar contenido sin respeto por la ley ni el debido proceso, son incompatibles con un gobierno democrático.
Además, la red social publicó un fragmento de una resolución judicial reciente que ordena nuevamente la eliminación de varios perfiles y amenaza con una multa diaria de 20.000 reales (alrededor de 3.600 dólares) y prisión por desobediencia si no se cumple.
Elon Musk, el propietario de la red social, expresó su desacuerdo con las acciones del juez, sugiriendo en un mensaje que debería ser destituido y apoyando las propuestas de la ultraderecha brasileña para iniciar un proceso de impeachment en su contra.
Además, Musk comparó a De Moraes con el villano Voldemort de Harry Potter, utilizando una imagen para subrayar su descontento de manera satírica.
Alexandre de Moraes es conocido por dirigir una investigación sobre la difusión de noticias falsas.
Durante su presidencia en el Tribunal Superior Electoral, ordenó la eliminación de numerosas publicaciones en X que cuestionaban la integridad del sistema electoral brasileño durante las elecciones de 2022.
Además, lidera una investigación contra el expresidente Jair Bolsonaro por su presunta implicación en un intento de golpe de Estado tras perder las elecciones frente a Luiz Inácio Lula da Silva.
Estas acciones han generado descontento entre los seguidores de Bolsonaro, convirtiendo a De Moraes en un blanco habitual de críticas y ataques durante las manifestaciones ultraderechistas.